El GIRD o déficit de rotación interna glenohumeral es una de las situaciones clínicas más habituales que se presentan en los pacientes con problemas de hombro. Sin embargo, su manejo no es fácil y no siempre tenemos claro algunos conceptos que vamos a repasar, en base a la evidencia científica actual.
En primer lugar, antes de valorar si el paciente presenta un déficit de rotación interna, debemos saber cuál es la cantidad de ROM en rotación interna. En una muestra de 39 sujetos, el valor medio (SD) del ROM en rotación interna – medido en decúbito supino a 90° ABD – se observa que es de 55.63°(11.5), con un rango máximo de 70°.
También puede considerarse que, habitualmente, el rango en rotación interna supone un 60% del ROM disponible en rotación externa.
Y, por último, si consideramos el valor medio de rotación total (TROM) vemos que éste alcanza los 148.46° (valor máximo 185°)
“Descriptive report of shoulder range of motion and rotational strength six and 12 weeks following arthroscopic superior labral repair” . ELLENBECKER TS, SUEYOSHI T, WINTERS M, ZEMAN D. North A J Sports Phys Ther 2008,(3);2:95-106
¿Y cuando podemos empezar a considerar que existe un GIRD?
Existen variaciones a lo largo de los estudios según el tipo de poblaciones analizadas pero, en general, se considera que hablamos de déficit de rotación interna cuando existe una diferencia superior a los 18º – 20º respecto al hombro contralateral, o bien si existe una diferencia superior al 10% del TROM total.
“Prevention of shoulder injuries in overhead athletes: a science-based approach” . COOLS AM, JOHANSSON FR, BORMS D, MAENHOUT A . Braz. J. Phys. Ther 2015;19(5):331-9
En el deporte, la existencia de GIRD se relaciona con ciertos gestos como el lanzamiento del beísbol o el saque del tenis.
En los deportistas overhead, se ha identificado un patrón constante de pérdida de rotación interna y ganancia de rotación externa; y se diferencian dos tipos de GIRD: el anatómico y el patológico.
GIRD anatómico Vs GIRD patológico
Hablamos de déficit de rotación interna anatómico cuando la diferencia de TROM respecto al hombro contralateral no supera los 5º, y la relación entre GIRD y ERG es igual a 1. Esta situación parece proteger al deportista frente a las lesiones y es por eso que los especialistas recomiendan no intervenir para mejorar la rotación interna, porque eso podría generar mayor inestabilidad.
Podemos verlo con un ejemplo:
En cambio, en el GIRD patológico, vemos que la pérdida de movimiento supera los 5º respecto al TROM del lado sano, y, además, la relación entre la pérdida de rotación interna y la ganancia de rotación externa es mayor que 1. En esos casos, se recomienda planificar una intervención para mejorar la rotación interna.
“Glenohumeral motion deficits: friend or foe?” . ROBERT MANSKE, KEVIN E. WILK, GEORGE DAVIES, TODD ELLENBECKER, MIKE REINOLD. Int J Sports Phys Ther ,2013 Oct;8(5) :537
Y…en los que no son deportistas overhead, ¿qué tenemos que saber?
Hay diferentes estudios que han probado la relación entre:
- GIRD y aumento de la traslación anterior de la cabeza humeral
“Rehabilitation of shoulder impingement syndrome and rotator cuff injuries: an evidence-based review” . ELLENBECKER TS, COOLS A. Br J Sports Med 2010;44:319-327
- GIRD y aumento de la báscula anterior escapular
“Scapular angular positioning at end range internal rotation in cases of glenohumeral internal rotation deficit” . BORICH MR, BRIGHT JM, LORELLO DJ, CIEMINSKI CJ, BUISMAN T, LUDEWIG PM. J Orthop Sports Phys Ther. 2006 Dec;36(12):926-34
- GIRD y rigidez de la cápsula posterior del hombro
“Prevention of shoulder injuries in overhead athletes: a science-based approach” COOLS AM, JOHANSSON FR, BORMS D, MAENHOUT A . Braz. J. Phys. Ther 2015;19(5):331-9
Teniendo esto en cuenta, podemos pensar que, para mejorar la pérdida de rotación rotación interna, puede ser una buena idea elegir ejercicios para:
- Llevar la cabeza humeral hacia posterior (como el ejercicio de cuadripedia)
- Promover la báscula posterior (como el ejercicio Low Row)
- Flexibilizar la cápsula y región posterior del hombro
Y, por otro lado, es imprescindible potenciar el músculo subescapular, que es el único músculo del manguito rotador que realiza la rotación interna promoviendo el deslizamiento posterior de la cabeza humeral.
Para ello, deberemos elegir posiciones en las que trabaje de forma aislada respecto a otros músculos rotadores internos, en particular respecto al pectoral mayor, que es el principal desestabilizador anterior de la cabeza humeral.
“Electromyographic analysis of shoulder girdle muscles during common internal rotation exercises” ALIZADEHKHAIYAT O, HAWKES DH, KEMP GJ,FROSTICK SP. Int J Sports Phys Ther 2015 Oct(10) 5:645-654
Por tanto, una propuesta de ejercicios para mejorar la rotación interna podría ser ésta:
Puedes ver nuestro vídeo resumen en el siguiente vídeo – resumen